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Manual de buenas prácticas para la digitalización del sector retailer

  • Publicado el 05 de Agosto de 2020

Qdqmedia, la mayor agencia de marketing digital para el sector retailer en España, presenta la segunda entrega de su Manual de Buenas Prácticas para la digitalización del sector Retailer, una iniciativa que la compañía ha elaborado con el objetivo de ayudar a los retailers a resolver todas sus necesidades, dudas y consultas asociadas a sus necesidades de transformación digital.

A continuación, compartimos contigo las últimas tres píldoras informativas elaboradas por qdqmedia enfocadas en la adaptación online de los retailers, necesaria en estos tiempos de renovación y cambio, buscando mejorar la visibilidad en redes sociales y mejorar la visibilidad en redes sociales y mejorar el servicio por estos canales, ahora mismo los únicos disponibles para muchos negocios.

Manual de buenas prácticas para la digitalización del sector retailer

1. Definir redes sociales en las que crear perfiles, así como las correspondientes estrategias. Según el estudio realizado por We Are Social y Hootsuite sobre las tendencias del uso de Internet en 2019 en España, si un negocio no está en redes sociales es como si no existiera. Las redes sociales se han convertido no sólo en una herramienta de relación entre personas, sino entre clientes y empresas, un canal más de comunicación uy de negocio, con unas características muy definidas basadas en la inmediatez y la cercanía de los perfiles.

Las restricciones sociales y laborales a las que el país está sometido en la actualidad convierten en esta realidad en más importante aún todavía, ya que los canales online se han convertido muchas veces en los únicos que están a disposición de los retailers. En este caso, hay que considerar que el tráfico en redes sociales ha crecido en estos días un 55% y se ha incrementado el uso de los teléfonos móviles para navegar por internet un 38,3%, en un estudio elaborado por Smartme Analytics.

Piensa qué redes sociales son las que más convienen: Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn… Cada una de ellas tiene sus características únicas y son interesantes herramientas, dependiendo del perfil del comercio. Instagram es perfecta para contenido visual, como escaparate de productos; LinkedIn es una red social más orientada a perfiles profesional y a comunicar información corporativa y consejos que podamos hacer a través de un blog. Twitter es la red social más dinámica y es perfecta para comunicar pequeñas piezas de información y ofertas puntuales, mientras que Facebook sigue siendo la red social con más alcance y admite más tipos de contenido.

2. Implantar el ecommerce: El ecommerce está viviendo momentos de transformación digital. Se ha convertido en la única alternativa de multitud de empresas, la única forma de operar de cara al confinamiento. De hecho, durante estas fechas se ha podido ver un repunte del 62% en la venta de productos de rápido consumo por internet en España, según datos de Nielsen. Los clientes que demandan este tipo de servicios no paran de crecer y puede ser una oportunidad para reconducir un negocio.

El ecommerce no sólo requiere de una infraestructura online, con una plataforma fiable y accesible que haga sencilla tanto la navegación por los productos que se pongan a la venta como a la hora de gestionar el pago y el envío, sino que también es necesario poseer una infraestructura física para llevarlo a cabo: almacenaje, manipulación, envío y seguimiento de las compras. Se requiere de un cambio de mentalidad y de invertir tiempo y esfuerzo para abrir esta oportunidad de negocio, pero se ha convertido en necesaria y no sólo puede ayudar a sortear la inactividad, sino que también puede ayudar a la recuperación para cuando los comercios vuelvan a poder abrir sus puertas.

3. Mejorar y optimizar la satisfacción del cliente en los canales online: Ya se ha comentado que los clientes cada vez navegan más y compran más por internet, con lo que tener una página web preparada y accesible se ha convertido en algo aún más imperativo si cabe, ya que es la única manera en la que algunos retailers van a poder relacionarse con sus potenciales clientes a corto plazo.

La transformación digital es obligada y esto convierte en necesario tener en cuenta algunos factores, como el de si una página web es responsive y está preparada para una visualización óptima en dispositivos móviles, que tenga un diseño agradable y esté enfocada a la conversión, con canales de comunicación claros y sencillos de usar, ya sea a través de formularios, direcciones de correo o comunicación directa media aplicaciones de mensajería como Whatsapp o Telegram. Es recomendable ofrecer un valor añadido a la marca, mediante la actualización periódica de un blog corporativo, que tenga contenidos interesantes para el público objetivo y, además, como mencionamos en el primer punto, integración con las redes sociales, que permitirán expandir la audiencia más allá de los navegadores.

Es importante tener en consideración de que, aunque sea necesario hacer cambios hoy en día debido a las circunstancias especiales que nos rodean, es igual de necesario pensar en los cambios a futuro, que se puedan aprovechar una vez todo pase. La transformación digital es un proceso que requiere esfuerzo, pero también es un proceso duradero que tiene beneficios que van allá del futuro inmediato. Invertir en el futuro siempre es inteligente.

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