Según informa Intergraf, asociación que promueve y protege los intereses de la industria gráfica a nivel europeo en su último boletín, lo impreso y lo digital se pusieron a prueba en un debate en Westminster (Londres). La eficacia del material impreso en las campañas de marketing fue objeto de un debate en la Cámara de los Comunes en julio, donde representantes de todo el sector de la comunicación debatieron si las campañas que incluyen material impreso son más eficaces que las que se basan exclusivamente en canales digitales.

Los defensores de la moción destacaron las cualidades distintivas del material impreso, destacando su presencia física, permanencia y capacidad para generar confianza. Argumentaron que, en un entorno mediático dominado por el contenido digital y las constantes notificaciones en línea, los materiales impresos destacan por atraer al público de forma más tangible y duradera.

Se dieron ejemplos de cómo el material impreso puede ampliar el impacto emocional de otros canales, ofreciendo una sensación de credibilidad y continuidad que ayuda a reforzar el mensaje de una campaña. Quienes se opusieron a la moción destacaron las ventajas del marketing digital, en particular su capacidad para llegar a un público más joven y nativo digital.

Destacaron la importancia del análisis del comportamiento, la personalización y la oportunidad, señalando que las campañas efectivas hoy en día se basan en datos y se diseñan en función de la experiencia del consumidor, más que en las preferencias de medios. Argumentaron que las herramientas digitales pueden ofrecer contenido relevante, inmediato y adaptado a cada usuario de una manera que el formato impreso no puede replicar.

El debate reflejó la amplia gama de perspectivas presentes en la sala, con contribuciones tanto de profesionales del sector impreso como del digital. Si bien la votación inicial favoreció firmemente al formato impreso, al final del debate algunos asistentes cambiaron de opinión, reconociendo los argumentos convincentes sobre la capacidad de respuesta y el potencial de segmentación del formato digital.

En el recuento final, se aprobó la moción de que las campañas que incluyen el formato impreso son más efectivas. Sin embargo, el debate destacó que la verdadera fortaleza del marketing moderno no reside en comparar un canal con otro, sino en combinar sus cualidades complementarias. La impresión ofrece tacto, credibilidad y durabilidad, mientras que la tecnología digital proporciona velocidad, precisión y adaptabilidad. Juntos, pueden crear campañas más memorables, significativas y, en definitiva, más efectivas.